El rojo es un color cálido por excelencia, luce muy seductor y hasta excitante. La variada carta de colores rojos es muy común en la decoración de interiores, ya que ha sido un color que se utiliza desde hace siglos para tal fin. Actualmente se incorpora en las decoraciones más modernas desplegando sus impactantes características, como siempre.
La amplia paleta de los rojos está compuesta por tonos fuertes, que pueden resultar dominantes en el sitio donde sean usados, por ésto se aconseja utilizarlos de forma medida para no crear un espacio desequilibrado.
Actualmente se acostumbra a combinar el color rojo con blanco, gris y negro. Con esta paleta básica se obtienen espacios elegantes, de apariencia muy moderna y atractiva, claro está que todo depende de mucho otros factores aparte de los colores, como los materiales, las texturas, el estilo de los muebles y la construcción en general.
Pero no cabe duda que el rojo pueda acompañarse de colores tierra, marrones, beige, maderas en tonos claros y oscuros. De esta manera el ambiente puede ser mucho más acogedor, cálido y confortable.
Las tonalidades rojizas suelen opacar, e incluso hacer invisibles a simple vista, a objetos de otros colores, por eso hay que usarlo con prudencia. Pero con su amplia gama de tonalidades se logran obtener espacios para todos los gustos y de diversos estilos.
Fuente: Pinto Mi Casa / Fotos: ALBA